La directora ejecutiva de Fiotec, Cristiane Sendim, visitó el lunes (13 de mayo) la sede del Ballet Manguinhos y conoció de cerca las instalaciones que atienden aproximadamente 350 alumnos de comunidades de la región. La presidenta de la iniciativa, Carine Lopes, presentó las aulas y los espacios comunes del edificio que alberga el Ballet desde 2019, en Higienópolis, en la ciudad de Río de Janeiro.

Además de los jóvenes y adolescentes ya inscritos en las clases de ballet, otros 700 esperan una plaza. Pero el proyecto no se limita a la danza clásica. Hay cursos dirigidos a la población de las comunidades de la región, como uno que reúne a más de 120 mujeres para discutir sobre la violencia de género, y otro que ofrece formación empresarial también para mujeres.

Aunque los fondos recibidos a través de donaciones y leyes de incentivo garanticen la continuidad de las clases y cursos, Carine afirma que el Ballet Manguinhos tiene dificultades para mantener la infraestructura de su sede y este fue el punto principal de la conversación entre las dos gestoras. "Vuelvo a Fiotec con el compromiso de analizar internamente las posibilidades legales para definir un apoyo a medio plazo para el funcionamiento del Ballet Manguinhos. Esta iniciativa debe tener una casa bien estructurada", afirmó Cristiane Sendim.

Para Carine, el Ballet y Fiotec no son instituciones vecinas, sino habitantes de la misma región, de un mismo territorio. "Es muy importante que una institución como Fiotec crea en nuestro trabajo y le dé credibilidad. Llevamos 12 años actuando en estas comunidades y contar con instituciones como esta a nuestro lado demuestra que vamos por el camino correcto, consiguiendo abordar problemas importantes para quienes viven aquí", subrayó Carine, resaltando que estas asociaciones son muy importantes para transformar la realidad a través del arte y la cultura.

Ballet Manguinhos
El proyecto, que lleva 12 años actuando en el complejo de favelas de Manguinhos, una de las regiones con menor IDH de Río de Janeiro, realiza clases de ballet, circo, danza contemporánea, danza moderna y boxeo para alumnos de entre 6 y 65 años.

Considerada la mayor institución cultural de la zona norte de Río de Janeiro, el Ballet aspira a convertirse en los próximos cinco años en un centro de referencia para la enseñanza y la investigación de danza y cultura en Brasil. La idea también es ampliar el alcance del proyecto para incluir disciplinas deportivas y educativas, promoviendo siempre la equidad de género.

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